La mitología dice que Géminis es un signo de personalidad dividida, un cuento de dos mitades. Pero Géminis es un alma completa, un solo espíritu con muchas facetas brillantes. Su ritmo puede ser rápido y qué lado despertará cada mañana sigue siendo un misterio, pero es importante que Géminis se mantenga con los pies en la tierra y no sienta que es un puñado de piezas dispersas.

La Ágata Encaje Azul es excelente para aquellos Géminis que sienten los bordes ásperos de los nervios desgastados. Vinculada profundamente al alivio del estrés, esta piedra azul calmante aporta claridad, limpieza y el encanto de una suave mañana de primavera. Conectada al corazón y al chakra de la garganta, también ayuda al Géminis, que a veces busca complacer a los demás, a tener el valor de decir lo que realmente piensa.

La Ágata Musgo es una piedra vivaz de colores primaverales que ayuda de forma excepcional a canalizar ese exceso de energía. Resuena con las vibraciones del corazón como si pulsara las cuerdas de una lira, enviando notas cálidas que permanecen mucho después. Sus tonos hipnóticos nos recuerdan mantener el valor y aflojar el agarre del miedo; un alivio bienvenido para el Géminis que puede luchar con la indecisión.

La Apatita Azul nutre el crecimiento espiritual, invitando a conexiones psíquicas más fuertes, sueños lúcidos y viajes astrales a planos superiores.

La Crisocola es otra piedra de comunicación y es conocida por sacar a la luz sentimientos de culpa. Sus tonos azul turquesa y verdes suavizan el dolor del corazón y ayudan a fomentar niveles más profundos de autoconciencia y sabiduría.